lunes, 2 de febrero de 2009

como era de esperarse.

tal para cual, los mismos de siempre, el alma gemela y el amor de la vida que nunca se juraron ser; él por su lado bostezaba con ganas, ella por su parte entrelazaba su cabello. sin pensarlo, en un automatismo tan propio de cada noche, quitaba los rizos de su cara para encontrarse frente al espejo, absorta, devolviéndose una sonrisa casi inimaginable. él por su lado, parpadeaba al ritmo de una pelota de tennis al rebotar en la cancha, ella por su parte se quitaba la blusa y buscaba sin mayor suerte su ropa de dormir. en un segundo recordó dónde estaba. y se abrió paso la noche, y con ella las nostalgias, el silencio que sólo él podría callar. se abrió paso en su habitación el recuerdo, las imágenes que se erigían en las paredes, tan sublimes.


como era de esperarse
te extraño pese a todo
al no adiós y a los besos
al te amo y al te espero
te extraño sobre todo
por te amo y por te espero.

como habrás imaginado
haces falta
en mi cuerpo y en mi cuarto
de fugas y recuerdos
de errores y otros besos
no tan errados.

como era predecible
pesa el día
como un bulto
moribundo y encantado
que agoniza entre los brazos
del ayer más nuestro.

como era de esperarse
cuesta tanto
contar dos, si sólo quedamos
yo y mi sombra
tú y ellos
centro y sur
sólo queda la sonrisa
más bien frágil, la sonrisa
porque no estás
por qué te vas.

como habríamos adivinado
no es tan fácil
ni tan sumamente complicado
no estar aquí o allá
mas cuando estemos
y no extrañemos
ni hagamos falta
no pesará
ni costará tanto
y contaremos dos
como si fuera uno
y tú estarás

por qué te vas.